Aprender a prevenir también es solidario.
La higiene, entendida en su sentido amplio como la prevención de enfermedades y de riesgos para la salud, es esencial para garantizar la supervivencia de millones de niños y niñas en todo el mundo. Los riesgos para la salud se multiplican en los lugares más pobres del planeta y entre los sectores de población más desfavorecidos de los países industrializados. El logro del desarrollo económico y social necesario para equilibrar la balanza es clave, como lo es también la difusión del conocimiento sobre temas clave de prevención.
La higiene, entendida en su sentido amplio como la prevención de enfermedades y de riesgos para la salud, es esencial para garantizar la supervivencia de millones de niños y niñas en todo el mundo. Los riesgos para la salud se multiplican en los lugares más pobres del planeta y entre los sectores de población más desfavorecidos de los países industrializados. El logro del desarrollo económico y social necesario para equilibrar la balanza es clave, como lo es también la difusión del conocimiento sobre temas clave de prevención.
Cada año más de 9 millones de niños no llegan a su quinto cumpleaños por causas prevenibles y evitables, como las enfermedades respiratorias, la diarrea, el sarampión o las complicaciones prenatales. Un mayor fortalecimiento de los sistemas de salud y del acceso a la sanidad de los más pobres, así como una adecuada información y educación pública sobre temas de prevención son esenciales para revertir esta tendencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario